2 de agosto de 2007

Las chicas lindas no deben leer


¨El año del pensamiento mágico¨es la última gran novela que he leído, y debiéramos leer.
Ahora, no es precisamente una novela aunque se lee como tal. Se trata de un ensayo, de uno fatal, del que la propia autora practica de su vida, de su tragedia familiar, de su aceptación o no del mundo que le toco sufrir.
Didion tiene una serie de publicaciones en ingles, la mayoría de ellos muy exitosos, pero ninguno cómo este último. La puntillosidad con la que recrea las últimas horas de vida de su marido, la espeluznante y vertiginosa enfermedad de su única hija, y la frialdad para recordar cada instante de su cambio de estado civil es a veces monstruoso, una foto que no todos están dispuestos a mirar.
No se trata de un texto de autoayuda ni mucho menos, es la toma de conciencia de cualquiera de nosotros en forma lúcida de la insignificancia de vivir, sin saber que todo se nos puede escapar en un instante, e incluso así parte: ¨la vida cambia en un instante, la vida cambia¨.
En una versión más literaria de la observación de nuestro núcleo nos llegó ¨Mi madre, in memoriam¨ de Richard Ford. Algo así como la versión femenina de ¨Patrimonio¨de P. Roth. Cuenta la vida de su vieja antes de casarse, los pasajes semi claros de una mujer extraña, que es madre tardíamente, que enviuda al poco rato de casarse. No es complaciente el muchacho con su mami, para nada un ¨mamón literato¨. Tampoco es un enrostramiento de culpas. Es la indagación en tus antecedentes familiares, una manera de explicarse a si mismo. Un ejercicio nada sano.
De ahí el título de hoy, hay cosas que es mejor no saber. Qué horrible es hacerles ver a las chicas lindas ansiosas de buena literatura esos mundos odiosos. Para eso les bastará la vida. Para eso están nuestros padres.